Uno de los mayores atractivos de los lofts es la posibilidad de jugar con sus superficies únicas. El hecho de que la gran mayoría esté formada por un espacio abierto permite combinar diversas opciones para crear un interior personalizado. La gran adaptabilidad de los espacios sin paredes ni particiones posibilita, además, cambios y remodelaciones menos costosas que otras viviendas convencionales. Gracias a las grandes alturas, que algunos loft tienen la suerte de tener, se crean niveles en los que ubicar las diferentes zonas de una vivienda. Así mismo, los paneles y las particiones parciales también permiten jugar con las aberturas y proporcionan diferentes grados de privacidad dependiendo de la ocasión.
El interiorismo, también desempeña un importante papel en la creación de un loft genuino; el uso de los colores y la distribución del mobiliario pueden separar visualmente los distintos ambientes. La conservación de antiguos detalles industriales, como columnas y pavimentos, evoca el pasado de los edificios y sus actividades.
Los edificios de lofts de nueva construcción consiguen crear una distribución racional de los espacios y los servicios y proporcionan a la hora de decorar CARTA BLANCA EN EL DISEÑO DE INTERIORES.